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Los precios internacionales de los cereales se encuentran en niveles cercanos a los valores récord registrados en el año 2008. De acuerdo con el Índice de Precios de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), en el mes de mayo de 2022 se dio un aumento de 29,7% con relación al mismo periodo del año anterior y de 2,2% respecto a abril.
Teniendo en cuenta el maíz, la cotización promedio al cierre del mes de mayo fue de USD 301,72 por tonelada. Las perspectivas apuntan a que los precios del cereal se mantendrán elevados, fundamentalmente por la previsión de menor oferta por parte de EE. UU., principal proveedor mundial del cereal. Además, se espera que la producción de Ucrania, otro mercado clave en la oferta del cereal, caiga más del 50% frente a la última campaña, con lo cual sus exportaciones experimentarían importantes mermas.
No obstante, la suba de precios podría amortiguarse si los resultados de la cosecha de maíz zafriña son favorables en los países de Sudamérica, en especial de Brasil, el segundo productor mundial de este cereal. Cabe destacar que se espera un incremento de 31,6% en la producción de maíz de dicho país.
En cuanto al trigo, el precio promedio al mes de mayo superó su valor de USD 400 por tonelada. Las proyecciones de una significante caída de la oferta exportable de Ucrania y la incertidumbre acerca de la cosecha de trigo de invierno en EE. UU. y en otros países productores aportan presiones alcistas. Asimismo, las limitaciones en las exportaciones de India y estimaciones de menor producción mundial se suman a este panorama.
Se podría considerar que los altos precios de los cereales favorecerían a la cosecha de maíz y trigo en Paraguay. También, las condiciones de las parcelas de maíz zafriña acompañarían, pues se espera que la producción nacional supere las 5.000.000 de toneladas que fueron sembradas en más de 1.000.000 de hectáreas. Asimismo, se proyecta que la campaña de trigo, la cual se encuentra en sus inicios, arroje una cosecha de aproximadamente 1.000.000 toneladas, a diferencia de la cosecha de la zafra anterior, que arrojó un volumen aproximado de 700.000 toneladas.
Es importante recordar que estos cereales tienen una gran importancia en la canasta básica familiar, puesto que son la materia prima de varios alimentos. En el caso del trigo, es el principal insumo de los panificados, y el maíz es el componente fundamental de las raciones de los alimentos de los animales productores de proteína.
Por lo tanto, los altos precios de estos commodities se ven reflejados también en los productos comercializados localmente, que a su vez inciden en la inflación del país, que en el quinto mes del año corriente alcanzó una variación interanual de 11,4%. Concretamente, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de los cereales y derivados, en el mes de mayo, registró su valor más alto nunca antes registrado.