El Ing. Agr. Luis Cubilla, asesor agrícola de Capeco, respecto al desarrollo de la soja en la presente campaña, indicó que con las condiciones de bajas temperaturas al inicio de la zafra, sumadas al estrés hídrico de este mes de diciembre, se estima una merma de un millón de toneladas aproximadamente; es decir, de la expectativa de 10,3 millones de toneladas, bajaría a 9,3 millones. Fue durante la evaluación de fin de año realizada esta semana.
Cubilla dijo que se espera que la condición mejore para garantizar un volumen de cosecha capaz de reactivar todo el campo, luego de los resultados nefastos registrados en la campaña anterior.
En cuanto al avance de la agricultura en el Chaco, mencionó que se prevé que la soja ocupe un área de 70 mil hectáreas, 20 mil más que la campaña anterior, aunque mucho dependerá de la expansión del algodón que tiene una ventana escasa de siembra.
Respecto a la campaña anterior, explicó que la condición climática jugó un rol preponderante, debido a una sequía que redujo notoriamente la capacidad productiva de soja en el país. Pero, resaló que, posteriormente, el maíz zafriña tuvo mejores condiciones que favorecieron el desarrollo vegetativo y reproductivo de este cultivo que llegó a los 6 millones de toneladas de cosecha, brindando una oportunidad de generar recursos tanto a los productores como a los otros actores de la cadena de valor.
Por su parte, la Ing. Agr. María Luisa Ramírez, asistente de Asesoría Agrícola, explicó que Capeco sigue con su programa de investigación de variedades de soja tolerantes a las temperaturas y el estrés hídrico. Las líneas más avanzadas se encuentran en F6; es decir, faltaría entre 4 a 5 años para considerar la liberación comercial de estos materiales que deben presentar una buena productividad en condiciones extremas para recomendar su lanzamiento al mercado.