(Español) Quiebre de la producción de soja asciende a 23,5% y pérdidas económicas a USD 1340 millones

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La campaña de soja 2018/19 registró un quiebre de la producción de 23,5 %, que representa 2,4 millones de toneladas de merma. Con esta información se consuma una producción global de 7,8 millones de toneladas, frente a la estimación inicial que ascendía a 10,2 millones de toneladas, según indicó el Ing. Agr. Luis Cubilla, asesor agrícola de la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas (Capeco), que en conjunto con la Unión de Gremios de la Producción (UGP), la Federación Paraguaya de Siembra Directa (Fepasidias) y el Instituto de Biotecnología Agrícola (Inbio), presentó los datos este jueves durante una conferencia de prensa.

Esta reducción de la producción, sumada a la disminución del 20 % de la cotización de la soja, representa una pérdida de USD 1340,5 millones, según comentó el Ing. Agr. Héctor Cristaldo, presidente de la UGP. “Es un zafra que golpea seriamente la economía del país”, enfatizó.

Cubilla indicó que el rendimiento promedio fue de 2216 kg por hectárea, uno de los más bajos de los últimos tiempos. Mencionó que en la siembra tempranera se sembraron un millón de hectáreas, cuya media fue de 1800 kg, para una producción total en este periodo de 1,8 millones de toneladas.

Las siembras de ciclo normal fueron las que recibieron las mejores condiciones en toda la campaña, por ende, se logró registrar un rinde de 2600 kg por hectárea, para una producción total de 3,38 millones de toneladas, considerando que en este ciclo se sembraron 1,3 millones de hectáreas. Las siembras tardías representaron 1,24 millones de hectáreas y se obtuvieron 2,67 millones de toneladas, en base a un promedio de productividad de 2150 kg por hectárea.

La soja tempranera sufrió temperaturas frescas, exceso de lluvias y pocas horas luz. Esto desembocó en plantas con poco desarrollo, en consecuencia, con bajo rinde. A su vez, las variedades de ciclo medio tuvieron temperatura normal, buenas lluvias al inicio y luego déficit de precipitaciones en el cargado de granos. En este ciclo se presentaron los mejores rindes.

Finalmente, las siembras tardías enfrentaron temperaturas elevadas, déficit hídrico, aborto de flores y de vainas. Ello conllevó a rindes intermedios.

Cristaldo solicitó al Gobierno nacional que considere estas cifras como un diagnóstico de todo el sector productivo que necesita ser tomado como prioridad en la agenda del país, teniendo en cuenta que en caso de no superarse este inconveniente, se acentuará el problema económico nacional.    

Superficie

El Lic. Federico Peckholtz, especialista en georreferenciamiento, presentó el informe sobre área sembrada, en el cual se pudo constatar el leve incremento de 33 mil hectáreas en la zafra 2018/19, frente a la anterior. En la presente campaña se sembraron 3,54 millones de hectáreas, mientras que en la pasada, 3,51 millones de hectáreas.

Los departamentos con reducción del área fueron Misiones, San Pedro y Concepción, mientras que el repunte principal se dio en Itapúa, Alto Paraná y Caazapá.

Efecto

Por otra parte, la reducción de la producción está teniendo efecto en otros segmentos como movimiento en puertos, navieras e importación de insumos y maquinarias, además del fuerte repunte del dólar ante la menor entrada de la moneda norteamericana al país por la disminución de las exportaciones de la soja y sus derivados, indicó José Berea, presidente de Capeco.

Berea resaltó que si no cambia el escenario, la superficie de siembra de la campaña 2019/20 podría sufrir una drástica caída, ya que los productores que estaban alquilando campos no se animarán a arriesgarse para tomar ese compromiso, por ende, se podría hablar de apenas 3 millones de hectáreas de siembra de la soja.

Canon

Ante el establecimiento de un canon para el ingreso de la soja paraguaya a suelo argentino, el presidente de Capeco informó que los últimos envíos de la oleaginosa ya entraron al vecino país pagando USD 9 más por cada tonelada. En contrapartida, el sector privado está trabajando de cerca con la Cancillería para subsanar este impase que representa un costo más que asumir para la cadena de la soja.