Desarrollado en el período1992-2001, contó con la participación del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la Agencia Alemana de Cooperación Técnica (GTZ) y la Cámara Paraguay de Exportadores de Cereales y Oleaginosas (CAPECO).
Pasar de la agricultura convencional (con labranza del suelo) al Sistema de Siembra Directa SSD (labranza cero), fue para el país una cuestión de “sobrevivencia”.
Suelos descubiertos y labrados, quedaban totalmente expuestos a la erosión hídrica originada por las lluvias trayendo la baja fertilidad, baja retención de humedad, pérdida de suelo, bajos rendimientos, y por ende, bajos ingresos.
Con la adopción del SSD Paraguay aumentó sustancialmente su productividad y llegó a ser reconocido mundialmente (100 % del área destinada a la producción de soja y cultivos en rotación bajo SSD).
Sin embargo, actualmente se constata una disminución del área sembrada en SSD. Volver a utilizar rastrones, pie de patos, cinceles, y otros implementos que remueven el suelo, solo traerá perjuicios que podrán ser verificados en corto tiempo, pero volver a recuperar suelos desgastados, requerirán años de trabajo, mucha paciencia y altos costos.
Capeco, firme en su convicción, continua apoyando activamente el sistema de Siembra Directa en el Paraguay, a traves de parcelas demostrativas y charlas técnicas.