Los precios internacionales de los principales commodities agrícolas se encuentran en los niveles más bajos de las últimas tres campañas. Aunque las cotizaciones de la soja y el maíz durante las últimas semanas de mayo verificaron los valores más altos no vistos desde enero del corriente año, en tanto que el trigo presentó precios no registrados desde julio de 2023.
Al analizar la cotización de la soja en la Bolsa de Chicago, específicamente el contrato más próximo (julio de 2024), se observa que al cierre del mes de mayo alcanzó los 442,57 USD/ton, lo que supone una caída del 7,3% en comparación con la misma fecha del año anterior. Asimismo, al comparar el valor promedio de los primeros cinco meses del año con la cotización promedio del mismo período en 2023, se constata una disminución del 13,0%.
A pesar de la incertidumbre sobre la cosecha final en Sudamérica, especialmente en Brasil, donde las regiones productoras del sur fueron afectadas por inundaciones, los precios de la soja no mostraron un aumento significativo. El avance de la siembra en EE.UU. es el principal factor que frena el alza de los precios, según el informe de cultivos proporcionado por el Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA), a principios de junio, la siembra se completó en un 78,0% del área total estimada para esta campaña, superando el promedio de los últimos cinco años.
Al mismo tiempo, se observa que el 55,0% de las parcelas sembradas ya se encuentran en la fase de emergencia de las plántulas. Otro factor que incide significativamente son las compras por parte de China, principal importador de la oleaginosa. Aunque es común que el gigante asiático se abastezca de soja brasileña durante el segundo trimestre del año, las industrias chinas están actualmente bien surtidas para los próximos meses y aún no han cerrado las compras futuras que normalmente realizarían desde septiembre en adelante para adquirir soja estadounidense.
Con relación a los cereales, la cotización del maíz, en el mes de mayo, también alcanzó su valor más elevado no registrado desde inicio de año, aunque no mantuvo su tendencia alcista. Al igual que la soja, el maíz está siendo sembrado a un ritmo favorable en EE.UU., con un avance del 91,0% en la siembra y un 74,0% en la emergencia de las plantas para principios de junio.
Las perspectivas futuras del precio del maíz dependerían en gran medida del estado de los cultivos en EE.UU, así como, de las condiciones climáticas en las regiones productoras de EE.UU. y el volumen de la cosecha de maíz zafriña en Brasil.
Por último, el trigo alcanzó sus niveles más altos a finales de mayo, llegando a 263,17 USD/ton, un valor no visto desde julio del año anterior, sin embargo, los precios no continuaron aumentando.
Para las proyecciones futuras, varios factores sugieren una posible tendencia al alza en los precios. Esto incluye la expectativa de una reducción del 4,0% en la superficie total de siembra de trigo en EE.UU., así como la sequía que está impactando a Rusia y Ucrania,. Además, las condiciones de clima seco en Australia también podrían influir en el desarrollo del cultivo y, por consiguiente, en la oferta global.