De acuerdo con el último informe de estimaciones de oferta y demanda de productos agrícolas publicado por el Departamento de Agricultura de los Estados Uniddos (USDA), la proyección de producción mundial de soja se volvió a ajustar a la baja. Se espera una producción de 369,64 millones de toneladas, es decir, 1,5% menos con relación a la estimación de marzo.
De acuerdo con el informe de MF Economía elaborado para Capeco, el ajuste a la baja se justificaría, principalmente, por el nuevo recorte de la producción de soja en Argentina. El organismo estadounidense estima que la cosecha alcanzaría 27 millones de toneladas, sin embargo, las proyecciones locales se encuentran en torno a 23 millones de toneladas. Cabe recordar que sería la campaña de soja con el volumen de cosecha más bajo de la última década para el vecino país.
En contraste, la proyección de producción de la oleaginosa por parte de Brasil pasó de 153 millones de toneladas a 154 millones de toneladas. En cuanto a lo que se espera localmente, la Compañía Nacional de Abastecimiento (Conab) estima una cosecha de 151,42 millones de toneladas.
Con referencia a la oferta de maíz, el USDA también recortó la cosecha mundial, pues pasó de 1.147,52 millones de toneladas a 1.144,50 millones de toneladas. El principal factor de este resultado, al igual que la soja, fue el ajuste de -7,5% de la producción de maíz en Argentina, para ubicarse en 37 millones de toneladas. Respecto a las perspectivas locales, la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) estima una producción de 32 millones de toneladas, una caída de 37,3% respecto a la zafra anterior.
Otro factor a considerar respecto a la oferta mundial de maíz es la producción por parte de Ucrania, tercer principal proveedor del cereal. Se proyecta que la cosecha llegue a 27 millones de toneladas, muy por debajo de los 42,13 millones de toneladas de la campaña anterior. Esta importante caída se fundamentaría en la persistencia del conflicto entre Rusia y Ucrania.
Por otra parte, se recuerda que la nueva campaña 2023/24 de granos a nivel mundial estaría iniciando en el mes de mayo con la siembra de soja y maíz en EE.UU. En efecto, todos los agentes vinculados con la comercialización de estos commodities estarán atentos al desarrollo de estos cultivos, puesto que el comportamiento de sus precios estaría influenciado en gran medida por su evolución.
Las primeras proyecciones acerca de las superficies de siembra en las parcelas norteamericana son de 35,4 millones de hectáreas de soja, igual que la campaña anterior. En cuanto al maíz, se espera que se siembren en total 37,2 millones de hectáreas, unas 1,4 millones de hectáreas más respecto a la zafra anterior.
En referencia a la demanda de granos, el USDA ajustó a la baja las importaciones totales tanto de la soja como del maíz, los recortes fueron de 0,4% y 0,3% para la soja y el maíz, respectivamente. Se destaca que las compras por parte de China, principal comprador de granos, se verían reducidas como parte de un plan de reducción de los granos y harina de soja en la alimentación animal.