EnglishEn medio de la incertidumbre generada por el conflicto bélico entre Rusia y Ucrania se observa una disparidad de la cotización internacional de commodities a niveles récord, lo cual impacta en la economía internacional, según el informe de MF Economía.
Uno de los efectos de la guerra de Rusia, el segundo exportador mundial de petróleo, con Ucrania es el aumento de los precios de la energía a niveles récord. La incertidumbre reinante por este conflicto y las sanciones impuestas al país ruso impactó en la cotización del petróleo brent, que ha alcanzado el valor de 129,12 USD/barril, cifra no alcanzada hace casi 10 años.
El informe señala que la guerra entre Rusia y Ucrania, dos de los principales exportadores de trigo y maíz a nivel mundial, también tuvo un impacto sobre los valores de esos cereales en el mercado de Chicago. El precio del trigo, por ejemplo, alcanzó su mayor marca histórica (475,46 USD/tonelada), mientras que el maíz alcanzó los 299,99 USD/tonelada, su valor máximo observado desde el año 2012.
Esta coyuntura ha generado una preocupación sobre cuándo volverá a ponerse en marcha el comercio desde estos dos países, que en conjunto constituyen el principal proveedor mundial de trigo, con una concentración del 25,6 % de los envíos. Asimismo, el conflicto pone en peligro las cadenas de suministros globales de otros productos esenciales para la actividad económica de varios países, factor que podría acentuar la inflación mundial.
Por otra parte, se avizora una interrupción del comercio global de fertilizantes a raíz de las sanciones impuestas a Rusia, considerando que el país es el principal exportador mundial de estos productos y el segundo mayor proveedor de Paraguay.
La comercialización interrumpida también ha afectado a Brasil, el principal proveedor de fertilizantes que, a su vez, importa el 19 % de estos insumos de Rusia. Conociendo este escenario actual y para evitar la escasez, el Gobierno brasileño ha discutido aumentar las importaciones de países como Canadá e Irán, ya que actualmente no posee suficiente stock en el país.
Finalmente, la falta de oferta de fertilizantes, esencial para la producción agrícola, ya se reflejó en los precios de importación durante el segundo mes del 2022. Actualmente, se está presentando un aumento de 216,1 % y la previsión es que los valores continúen incrementándose a medida que se acentúe la escasez mundial.
Al considerar el ingreso de los productos por Aduanas, se observa que en Villeta, que concentra el 70% del volumen importado, el valor aumentó 105,2%. Por su parte, en Caacupemí, que posee una participación de 2%, el valor se incrementó 102,2%. En relación a Ciudad del Este, que concentra aproximadamente el 14% del total de las importaciones de fertilizantes, el valor aumentó 379,5%, representado la mayor variación nacional.
En este último aumento mencionado, también influyó el incremento de precios del combustible, puesto que el transporte es principalmente terrestre, lo que implica mayores costos en el flete.