En un comunicado conjunto sobre las medidas restrictivas a la navegación impuestas por Argentina al transporte fluvial por la Hidrovía Paraguay-Paraná, los gobiernos de Paraguay, Brasil, Uruguay y Bolivia lamentaron las medidas aplicadas a partir de la aplicación de un peaje unilateral y arbitrariamente establecido al margen del Acuerdo de Santa Cruz de la Sierra y otras disposiciones reglamentarias internacionales vigentes. Reiteraron, además, el pedido de suspender el cobro del canon.
El comunicado emitido el 10 de setiembre resalta que a pesar de los cuestionamientos presentados por los cuatro Gobiernos en el ámbito intergubernamental de la Hidrovía, la República Argentina continúa impulsando medidas de esta naturaleza que, en este caso, significó en una orden de embargo e interdicción de salida de una barcaza paraguaya que estaba cargada y lista para zarpar, con base en la pretensión de cobro del referido peaje.
Expresan una especial preocupación por tratarse de una restricción a la libertad de tránsito de bienes estratégicos y sensibles para un país signatario que tiene comprometido el abastecimiento de combustible y que puede afectar el precio de este insumo, lo que representa una afectación grave que exacerba la vulnerabilidad de dicho Estado por su condición de país sin litoral.
“Al subrayar la importancia de mancomunar esfuerzos para facilitar el transporte comercial, favorecer el desarrollo y eficiencia de la navegación así como la institucionalidad del sistema de la Hidrovía Paraguay-Paraná, los Gobiernos de Bolivia, Brasil, Paraguay y Uruguay reiteran su solicitud a la República Argentina de suspender la aplicación de las resoluciones 625/2022 y 1023/2022 del Ministerio de Transporte, adoptar las medidas necesarias para garantizar la libertad de navegación y tránsito y se abstenga de aplicar otras medidas restrictivas a la navegación hasta tanto se resuelva la controversia en el ámbito intergubernamental de la Hidrovía”, resaltan los gobiernos.
Liberaron barcaza
El pasado 6 de setiembre, la barcaza MGT-05, perteneciente a la naviera Mercurio Group S.A., que estaba cargada y lista para zarpar con 2,7 millones de litros de combustible, fue retenida por la Prefectura Naval Argentina como reclamo por la falta de pago de una factura de USD 27.000 en concepto de peaje por el uso de la hidrovía, impuesto de forma unilateral por el vecino país.
A pesar de que la naviera pagó el canon ese mismo día, recién en la tarde de este 11 de setiembre Argentina liberó la embarcación que formaba parte de un convoy de 10 barcazas, según confirmó a Radio 1º de Marzo Luis Ortega, presidente de la empresa.